De quejas y desahogos


Pues al final resulta que no retomé el blog; espero me disculpen por ello los pocos lectores que tenía. Supongo que ya no estarán aquí muchos, pero los que queden espero comprendan que no ha sido por propia voluntad. Es verdaderamente poco el tiempo del que dispongo entre la universidad y los pocos hobbys que tengo (Pasarme videojuegos, vamos; tampoco es algo tan complejo, pero come horas de una forma monumental si lo haces a la par que llevas una carrera que diario te quita más de medio día de estudio).

Antes de empezar con todo lo que quiero decirles, me gustaría compartirles un vídeo de esos que me ayudaron a adentrarme aún más a la serie que nos unió; a Touhou, por supuesto. Es una versión sin terminar de lo que en teoría es un opening. Desconozco si se llegó a terminar, pero ésta cuasi-beta realmente es impresionante, considerando que no es más que un producto fanmade de por ahí del lejano 2013.



Sé que les gustará; tiene un aire a anime clásico que a mí en lo personal me encanta. Claro, por supuesto que algunas (Bueno, la gran mayoría) de las escenas del vídeo las toma prestadas de otras series (Entre ellas se encuentra una que ahora mismo no reconozco si es de Higurashi no Naku Koro Ni o de Umineko no Naku Koro Ni, aunque yo diría que es de la segunda serie, y varias de animes de mechas de hace bastante cuyos nombres no recuerdo), pero éso no le quita el mérito de ser una excelente obra de arte.

 Me encontré de nuevo con el mismo tratando de recurrir a mis viejos métodos de relajación; los PVs de Touhou y todo su material en general me distraían bastante cuando algo me causaba estrés. Creo que es algo de lo que he hablado antes, pero no estoy seguro de si lo llegué a hacer en el blog. El caso es que Touhou me llegó como anillo al dedo en una época en la que me daban duro una situación país deplorable (Que aún no mejora) y las putas hormonas durante la pubertad. Jugar sus títulos, escuchar su música y mirar vídeos de fans sobre la serie realmente me ayudaban a quitarme de la cabeza los problema de vivir sin darme ninguna clase de gusto más allá de lo que podía conseguir con un internet prehistórico, una familia desunida, una PS2 con un catálogo reducido y mi imaginación por supuesto.

El caso es que traté de poner en práctica ésa vieja terapia mía y me encontré con viejos conocidos de YouTube que me hicieron sentir más que nostálgico. La palabra se queda corta, si les soy sincero.

Pero lo importante no es éso, si no la razón por la cual recurrí a hacerlo.

Como más de uno sabrá (Más que nada porque lo he mencionado al principio de la entrada), me encuentro estudiando una carrera universitaria X; es irrelevante cuál es, más cabe decir que me exige ver materias con las cuales no estoy ni lo más mínimamente familiarizado. Sumen pues el estrés que conlleva la educación superior al que trae consigo el no estar, aún tras un buen tiempo de estudio, acoplado a las prácticas y quehaceres de la carrera.

Oh, y supongo que no lo han olvidado; también hay que sumarle el estrés de la situación por la que se encuentra pasando mi país desde hace unos cuantos años, y que le ha dado de lleno a mi familia. Soy Venezolano, en caso de que alguien no lo supiese. Creo que ni siquiera lo tengo indicado en mi perfil de Blogger. Dudo que alguien desconozca lo que ocurre por éstos lares, así que me ahorraré explicaciones. Comprendo que existe más de una versión sobre el tema, pero es algo que, sin más, me mama un cojón y parte del otro (Lo soez no se me va a ir sólo por estar hablando de un tema serio; la verdad es que lo amerita incluso); en todo caso, pueden investigar en la internet, o simplemente ir y preguntarle a su amigo o conocido Venezolano más cercano. Él o ella (O éso, o ellx/elx, o lo que sea el mandril subdesarrollado que existe algo más que la distinción biológica entre macho y hembra) sabrá qué decirles; su versión será la más fiable para ustedes si lo vivió en carne propia, o si lo vive, siempre y cuando no sea un puto oficialista o oposicionista empedernido. En ése caso, sólo recurran a San Google y lean bastante.

En fin, comentarios sociales aparte, estoy estresado y no sé qué demonios hacer.
Y cuando digo que no sé qué demonios hacer no me refiero sólo a que no sé cómo voy a hacerle para sobrellevar nuestra economía, si no cómo le voy a hacer para seguir soportando unos estudios que, sinceramente, no me apasionan en lo absoluto. Y es que son muchas cosas de la carrera que me mantienen literalmente asqueado. Una institución prácticamente en ruinas por la cual nadie se preocupa, pero que todo el mundo considera de las mejores universidades de latinoamérica, evaluaciones que, mas allá de ser de un nivel elevado para ser un reto para nosotros, no son más que burdas trampas para osos puestas justo en los asientos de nuestros pupitres para mordernos el culo apenas las toquemos (Así, como un pequeñito ejemplo, el primer parcial que tuve de una materia Y no lo resolvieron ni mi profesor ni el coordinador; el primero porque no tuvo ni puta idea y el segundo - El que lo "redactó"; y es que bueno, ni siquiera lo redactó. Sólo lo tomó y lo tradujo de entre los exámenes de una casa de estudio estadounidense - porque no tuvo los cojones de presentarse el día de la revisión. Cabe destacar que, además, durante la ejecución del mismo, mi profesor, no sabía nunca cómo responder a cada pregunta que le hacíamos sobre los tópicos del examen; no era porque no pudiese hacerlo ¡Verdaderamente no las entendía!, y es que, de hecho, él nunca nos dio ni una sola clase sobre lo que iba en su gran mayoría para las preguntas), y lo que llamamos aquí "Profesores piratas". Supongo que entenderán el término, pero en caso de que no, pues...Digamos que no son más que tipos que llegan a pararse en una tarima a leer de sus anotaciones o frente a la pizarra a escribir con sus putas tizas baratas tomadas del escritorio de la recepcionista de nuestra escuela hasta que se terminan las dos horas de clase.

Ahora que lo pienso, en ningún momento dejé de lado los comentarios sociales. My bad.

La unión de todas ésas cosas me han hecho pensar en algo; o que soy demasiado idiota (O algún derivado) para la carrera, o que simplemente el sistema per se es una puta mierda.

Y justo ésos pensamientos - Ambos - son los que me han hecho considerar el dejarla para irme a una a la que pueda acoplarme mejor, o lo que sea. Claro está, no lo haré por la presión social; no soy tan duro como piensan. Tras ésta masa revoltosa de groserías y vídeos de YouTube no hay más que un núcleo chicloso indefenso ante las mascadas de la vida (Puto asco).


Y sigo encontrándome con los vídeos que les mencioné antes; éste es bueno, pero sinceramente si estás pasando por una mala situación, o tienes líos en la cabeza, o si tu personaje favorita es Nitori, pues...Te va a caer mal. No dejará de ser excelente, pero te va a caer como una patada en los huevos.

Pero bueno, supongo que al final terminaré viendo otro ciclo más de clases y quejándome de las mismas materias de las que me quejo el presente. Una puta mierda, pero es el precio a pagar por ser alguien a futuro en ésta mierda de país (Y ni siquiera es aseguro, lo cual es más mierda todavía).

En fin, gracias por aguantarse mis estupideces un post más. Hasta la próxima.

Comentarios

  1. La verdad me sorprende que ese tipo de profesores puedan llegar a universidades, normalmente se encuentran mas en bachillerato, en fin, la consideran las mejores de latinoamérica por ser extremadamente baratas, si se hace la conversión de monedas claro está si ganas mucho en una divisa como el Dolar o el Euro puedes pagar una carrera completa cagado de la risa, aunque acá no es el caso de muchos, da mucha pena ver como se universidades como LUZ han sido tan deterioradas, tanto instalaciones como la constancia y calidad de las clases, ni hablar del infierno que es conseguir un cupo, pero tranquilo aun con el placebo en forma cambio de moneda lo mas probable es que un trimestre completo cueste otra vez mas 20 millones cuando ya vayas terminando.

    Fuerza y saludos desde Zulia de otro universitario fatigado, si no podemos continuar con ésto aun tenemos esa tenue esperanza que es unirnos a esa suerte de exodo masivo que se da en este ignorado y torturado país lamentablemente.

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    1. Sinceramente, jamás pensé que me encontraría con algo así tras salir del bachillerato, pero me terminó tocando. Vaya suerte la mía y la de mis compañeros.

      ¡Muchas gracias por los animos, e igualmente! ¡Saludos!

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